MÉXICO Y EL EXILIO UN RELATO DE FAMILIA
El asilo político a un personaje o ciudadano extranjero ha estado presente en nuestro país desde el 29 de diciembre de 1909, cuando el Presidente José de la Cruz Porfirio Díaz Morí mandó el cañonero mexicano “Guerrero” a rescatar y poner en tierra mexicana al presidente nicaragüense José Santos Zelaya, depuesto por orden de los Estados Unidos del presidente William Taft, si ese Taft que se reunió con Díaz el 16 de octubre de 1909, a partir de 1909 y con la revolución mexicana a cuestas México empezó a tomar fuerza en el extranjero y mandó el mensaje a Estados Unidos de la “No intervención a los pueblos de la tierra”, lo mismo hizo el presidente Plutarco Elías Calles en 1926 al proteger la vida de Augusto Cesar Sandino aquel libertador que provocó la revolución nicaragüense.
Los postulados del “Respeto al Derecho Ajeno es la Paz” y la Doctrina Estrada suscrita por el diplomático sinaloense Genaro Estrada Félix, que sostiene: “Que los países decidan si un gobierno extranjero es legítimo o ilegítimo, especialmente si este proviene de movimientos revolucionarios”, se pusieron en marcha con fuerza a partir de 1930, las frases y doctrinas del siglo decimonónico jugaron un papel preponderante de México como líder indiscutible de los países latinoamericanos, ¿Quién no recuerda la bienvenida a los niños de Morelia en 1937? ¿Quién no recuerda la llegada de las víctimas de la guerra Civil Española?, ¿Quién no recuerda la llegada de León Trotsky ideólogo de la revolución rusa víctima del presidente José Stalin?
México a lo largo de su carrera diplomática le ha abierto la puerta a miles de exiliados políticos y futuros mandatarios mundiales, como: Fidel Castro Ruz protegido de Adolfo Ruíz Cortines y el ex presidente Lázaro Cárdenas del Río, quien no recuerda la llegada de Isabel Allende viuda del presidente Salvador Allende de Chile quien falleció en un golpe de Estado, o el mismo Manuel Zelaya Rosales depuesto presidente hondureño recibido por el presidente Felipe de Jesús Calderón Hinojosa en el 2009, en fin México dentro de estás posturas manda el mensaje ante el mundo de que en algunos asuntos cede ante Estados Unidos y en otros no, el ambiente geopolítico latinoamericano ha sido cambiante desde la independencia Hidalguista y Bolivariana.
América Latina a lo largo de su historia ha sido un tremendo polvorín, y hoy México regresa del famoso “Comes y te vas” a las doctrinas impuestas por el presidencialismo priista del respeto a la soberanía de los pueblos, hoy México recibe con júbilo por un lado y odio por el otro al presidente bolivariano Evo Morales Ayma, el derrocado líder sindical que fue rebasado por la ambición del poder llega a México dejando una Bolivia en crecimiento y con menos pobres, como dicen los neoliberales y los economistas las estadísticas no mienten y ellas demuestran el gran logro de Evo, pero desgraciadamente el poder y la 4R (Cuarta Relección traicionaron la mentalidad de Morales Ayma), México hace bien en recibirlo pero hará más bien si empieza a reconsiderar su historia, de paso el presidente no puede ser candil de la calle y obscuridad de su casa.
PD: Bonito se ve el sistema presidencial mexicano al mandar el avión de la Fuerza Aérea Mexicana a salvar a Evo, bonita se ve la 4T transportando a la familia de José José en la misma flota de la FAM, pero se mirará más bonita la 4T si deja de simular la austeridad ya que cuesta millones mover un avión de la FAM para asuntos internacionales, de pasada pedimos que Porfirio Díaz regrese en un avión de la FAM y con honores militares como Calderón recibió al depuesto presidente Zelaya Rosales en el 2009.